Mercedes Benz SL

No hay mejor manera de demostrar lujo y excesos para una marca automotriz como el diseñar un largo y poderoso convertible.

El Mercedes Benz SL, sujeto de esta nota, salió a la venta en el año de 1989 e introdujo la cuarta generación (R-129 para los cuates y conocedores) con motores desde un 6 cilindros en línea hasta un fabuloso V-12 en algunas versiones AMG.

Además, el interior del auto estaba equipado de muy buena manera, de acuerdo con los estándares de la época. Piel y madera, como debe ser. Las líneas de su carrocería, pueden parecer aburridas, lineas rectas desde el cofre hasta la cajuela que le dan un aire clásico y sencillo que permite luzca fresco hasta el día de hoy.

El modelo de hoy está terminado en color negro con detalles cromados en faros y parrilla y con una base de plástico gris para establecer contraste entre la parte baja y alta de la carrocería. El interior es de plástico color rojo y las llantas son modelo 7SP de color dorado.